El circuito inferior de la economía urbana y la producción automotriz

Detalles Bibliográficos
Publicado en: Jornadas Nacionales de Investigación en Geografía Argentina (5 : 2018 : Tandil, Argentina) - Geografías del presente para construir el mañana - . Tandil : Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires, 2018
Autor Principal: Donato Laborde, Matías Germán
Formato: Documento de evento
Temas:
Acceso en línea:https://www.memoria.fahce.unlp.edu.ar/trab_eventos/ev.14522/ev.14522.pdf
https://jornadascig2018.wixsite.com/jornadascig2018
Resumen:El espacio geográfico no solo expresa la acción de los agentes hegemónicos, sino que puede ser entendido como sinónimo de espacio banal, es decir, "el espacio de todos los hombres, de todas las empresas, de todas las organizaciones, de todas las acciones" (Santos, 2000). En tanto, la gran ciudad puede considerarse como el espacio banal por excelencia, donde coexisten actividades de la misma naturaleza, aunque ejecutadas por actores de poder incomparable (Santos, 2000). Las modernizaciones, el impacto del fenómeno técnico y las marcadas diferencias de renta de la población constituyen algunas de las razones por las que el espacio de un país periférico tiene sus particularidades, debido a que su organización se define en función de intereses distantes y con frecuencia a escala mundial. Como indica Santos (2008) las fuerzas de modernización impuestas desde el exterior son extremadamente selectivas, en sus formas y en sus efectos, y tienen el poder de organizar el territorio y su configuración. De esta manera, las modernizaciones se implantan de forma desigual a lo largo del territorio. Se modernizan las estructuras productivas, las redes, los transportes, el medio construido y dotan de características particulares a los circuitos de la economía urbana. Estos circuitos responsables del proceso económico y de la organización espacial pueden ser examinados como dos subsistemas: el circuito superior y el circuito inferior. Cada circuito se define por el conjunto de actividades realizadas, y por el sector de la población que se asocia a éstas, ya sea por la producción o por el consumo (Santos, 2008). El circuito superior genera y utiliza las variables fuerza del periodo que son las finanzas, la información, la ciencia y la técnica y que definen la división territorial del trabajo más moderna. Así es como los bancos, comercios e industrias de exportación, industria y servicios modernos, mayoristas y transportistas constituyen el circuito superior. Mientras que el circuito inferior está compuesto esencialmente por producciones intensivas en mano de obra, por servicios no modernos y por comercio no moderno de pequeñas dimensiones (Santos, 2008). Santos (2008) plantea que las actividades de fabricación del circuito superior poseen dos organizaciones: la primera corresponde a la economía hegemónica y la segunda, una porción marginal de ese circuito superior, está constituida por formas de producción menos modernas desde el punto de vista tecnológico y organizacional, reuniendo características de cada uno de los circuitos. Desde esta perspectiva, esos circuitos son subsistemas del sistema urbano, que poseen relaciones de complementariedad, competencia y jerarquía. El circuito inferior se forma por actividades de pequeña dimensión y se compone esencialmente por producciones intensivas en mano de obra, por servicios no modernos y por comercio no moderno de pequeñas dimensiones (Santos, 2008). Los dos circuitos de la economía urbana no son sistemas aislados e impermeables entre sí, por el contrario, están en interacción permanente. El circuito inferior no se reduce a las denominadas actividades tradicionales, porque es un producto indirecto de la modernización, está en transformación y adaptación permanente; y una parte de su abastecimiento viene de los sectores considerados modernos, de los cuales depende (Silveira, 2014).